Calambres leves: cuando los músculos se vuelven locos

Puede que surgieran de la nada, tal vez lo intuías, pero ¡uf! Han llegado los retortijones abdominales dolorosos. Pero ¿cuáles son las causas?

Tu intestino es un tubo muscular largo que impulsa los alimentos semidigeridos hacia delante con movimientos rítmicos suaves y ondulatorios. Sin embargo, a veces los músculos de la pared intestinal se tensan y contraen más fuerte, siendo incapaces de relajarse. Los síntomas son el dolor abdominal y los cambios en los hábitos intestinales, como el estreñimiento o la diarrea. El aumento de los ruidos intestinales y la flatulencia son otros síntomas que suelen aparecer junto a los calambres abdominales y los espasmos.

¿Motivo de preocupación?

Las causas de los calambres abdominales incluyen irritaciones intestinales o bloqueo de los movimientos intestinales, que pueden dar lugar a enfermedades intestinales inflamatorias crónicas como la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa. Los problemas menstruales también pueden ser la causa de calambres y dolores en el abdomen ¡el intestino no es siempre la causa!

Si se ha descartado una causa orgánica, es probable que el desencadenante de los calambres abdominales recurrentes sea un trastorno gastrointestinal funcional (TGIF), que suele ir acompañado de una alteración de la motilidad intestinal. Nuestra dieta (comidas pesadas, alimentos con los que no estamos familiarizados, y/o especias picantes), o la tensión emocional y la ansiedad también pueden dar lugar a calambres abdominales.